La sorprendente respuesta de un médico a la epidemia de autoinmunidad y enfermedades crónicas
En los últimos cincuenta años, las tasas de autoinmunidad y enfermedades crónicas se han disparado: actualmente 1 de cada 2,5 niños estadounidenses tiene alergia, 1 de cada 11 tiene asma, 1 de cada 13 tiene alergias alimentarias graves y 1 de cada 36 tiene autismo. Si bien algunos atribuyen este aumento a una mayor conciencia y diagnóstico, el Dr. Thomas Cowan defiende una relación causal directa con un aumento correspondiente en el número de vacunas que suelen recibir los niños estadounidenses: aproximadamente 70 dosis de vacuna a los dieciocho años. El objetivo de estas vacunas es precisamente lo que estamos viendo ahora con tanta abundancia entre nuestros niños con enfermedades crónicas: provocar una respuesta inmune.
El Dr. Cowan analiza la evidencia emergente de que ciertas enfermedades infantiles en realidad protegen de enfermedades más adelante en la vida; examina el papel de la fiebre, el intestino y el líquido celular en la salud inmunológica; sostiene que la vacunación es un intento ineficaz (y perjudicial) de atajar una respuesta inmunitaria compleja; y afirma que el establishment médico se ha involucrado en un argumento autoritario que priva a los padres del consentimiento informado. Su pregunta fundamental, desde el punto de vista de un médico que tiene décadas de experiencia en el tratamiento de innumerables niños, es: ¿Qué les estamos haciendo realmente a los niños cuando los vacunamos?
